El grupo extremista Estado Islámico (EI) tiene secuestrada a una mujer estadounidense que realizaba labores humanitarias en Siria.

De ser cierta la información, esta mujer sería el tercer ciudadano estadounidense secuestrado por el EI, sumándose al periodista asesinado la semana pasada, James Foley, y al también reportero Steven Sotloff, quien aparecía con vida en una grabación emitida por los yihadistas.
La víctima de 26 años, cuya identidad no ha sido revelada, fue secuestrada en 2013 y exigen 6.6 millones de dólares por su liberación, según reveló la cadena ABC citando fuentes cercanas a la familia de la joven.
Al respecto la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, rechazó confirmar esta versión, "dada su privacidad y por su seguridad".

Además del monto exigido por su liberación, el grupo terrorista también pide la liberación de Aafia Siddiqui, un neurocientífico que estudió en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y que fue condenado en 2010 por la justicia estadounidense por el intento de asesinato de dos funcionarios de Estados Unidos dos años antes.
La petición de la liberación de Siddiqui ha sido recurrente por parte de los grupos extremistas desde que fuera encarcelado, pero la familia del neurocientífico emitió un comunicado rechazando cualquier vínculo con la violencia para la liberación de su hijo.
El Estado Islámico amenaza con acabar con las vidas de los rehenes que tiene en su poder si Estados Unidos no detiene los bombardeos selectivos contra sus posiciones en el norte de Irak, que comenzaron hace algo más de dos semanas.
Según revela AP, más rehenes estadounidenses han estado en poder de otros grupos extremistas.
Peter Curtis, de Boston, fue liberado recientemente por el Frente al-Nusra, grupo extremista suní rival del Estado Islámico.
Otro periodista independiente, Austin Tice, de Houston, desapareció en agosto de 2012 en Siria y se cree que la misma organización lo tiene de rehén.
Tice trabajaba para el diario The Washington Post, la cadena de periódicos McClatchy Newspapers y otros medios de prensa cuando fue secuestrado.
 
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